Corría el año 82, si ese en el que Inglaterra y Argentina se ensalzaron en una estupida e inútil guerra, ese en el que Israel invade el Líbano, ese en el que el psoe ganaba las elecciones, ese en el que Michael Jackson lanzaba al mercado “Thriller”, ese en el que una simpática naranja era la mascota del mundial de España, ese en el que se lanza al espacio la estación MIR, ese en el que el Papa Juan Pablo II viaja por primera vez a nuestro país, ese en el que a Jr le disparan en la serie Dallas, ese en que THE JAM anuncian su disolución, pues bien en ese año fue mi primer contacto con los mods, con 15 años y toda la juventud por delante pero en una ciudad de provincias y de provincias con un índice de paro por las nubes tubo que ser y tubo que ser en verano, en la playa y por la radio. Así fue como escuche por primera vez una canción que sin saberlo cambiaria el curso de toda mi vida. Por aquel entonces mi afición a la música me había permitido descubrir a los grupos de la explosión punk del 77 y algo mas cercano los mas incipientes grupos de la mal llamada movida, sin embargo ese grupo que el mismo año 82 se separaro después de 6 años juntos fue el que me descubrió el camino a los 60 y a escuchar a grupos como Small Faces y Who, además de toda una lista de grupos anglosajones de lo que se llamaría revival y un sin fin de grupos y estilos que con el tiempo fui descubriendo gracias a modzines, revistas, fiestas y concentraciones.
Definitivamente el descubrimiento y posterior acercamiento al movimiento mod se lo debo a una ciudad, una ciudad llamada Malice.
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